Los promotores de una iniciativa deportiva y social en una parcela del R-66 que está junto a la ronda norte mantienen su interés por desarrollarla. La prueba es que ya han presentado el estudio de viabilidad de un complejo deportivo y de recreo. Está en el ayuntamiento desde hace dos días. Con este paso se inicia un proceso que se va a prolongar durante un año antes de que empiecen las obras. Los promotores son cacereños y se han agrupado en una sociedad que se llama Padelonia y que está abierta a otros inversores. El proyecto se denomina Cáceres, capital del padel. Su coste de ejecución superará los 10 millones, según la estimación de uno de los promotores.
El objetivo de esta actuación es la realización de un centro deportivo con catorce pistas de padel y generar empleo para discapacitados. No es una idea nueva. Es la misma, solo que actualizada, que estos promotores iban a entregar en el ayuntamiento hace un año. La novedad es que el pleno del ayuntamiento aprobará en unos días, en su sesión ordinaria de abril que se celebra el jueves 19, el cambio en el uso del terreno donde se desarrollará, un trámite que es necesario para que pase de docente a deportivo una parte del suelo afectado.
Esta actuación se proyecta en dos hectáreas que son propiedad del ayuntamiento. Una parte de este suelo, con una superficie de unos 11.000 metros cuadrados, estaba reservada para fines educativos. Hizo falta que la Consejería de Educación renunciase al mismo, algo que hizo en febrero del año 2011, cuando informó al ayuntamiento de que las necesidades de escolarización de la zona estaban ya cubiertas y que no existían previsiones de uso de este terreno en el sector R-66.
El ayuntamiento también justificó el cambio en el uso del suelo por su interés a destinarlo a una instalación deportiva a raíz de la idea que presentaron los promotores del proyecto de Cáceres, capital del padel. Esta variación de uso docente a otro deportivo pasó por la comisión de Urbanismo que se celebró el 9 de marzo de 2011. Pero entonces se planteó que era necesaria una modificación en el plan general de urbanismo para que el pase de docente a deportivo se autorizase.
PLENO La comisión de Urbanismo que se celebró el pasado 20 de marzo acordó que esta modificación del plan, que iba a prolongar aún más el trámite administrativo, no era necesaria, dado que el uso del suelo es dotacional, para equipamiento, y solo se cambia el tipo, de docente a deportivo, por lo que no afecta ni a la ordenación estructural ni a la detallada del plan general. El dictamen de la comisión local se tiene que aprobar ahora por el pleno de la corporación municipal y su próxima sesión ordinaria es el jueves 19 de abril.
El paso siguiente es que los promotores presenten un estudio de viabilidad, algo que hicieron el lunes. Con el acuerdo del pleno, el ayuntamiento tiene un plazo de tres meses para analizar la viabilidad del estudio, decidir si lo acepta y si puede servir de documento base para la convocatoria de un concurso, exponerlo al público durante un mes y convocar un concurso al que pueden presentarse otras empresas que estén interesadas. El ayuntamiento pone el suelo, los promotores hacen una inversión, pueden explotar las instalaciones durante un periodo no superior a 40 años, y la infraestructura y el suelo revierten al ayuntamiento cuando finalice este periodo. Un antecedente de actuaciones de este tipo desarrolladas en la ciudad es el complejo deportivo que está en el Perú.
Según aseguraron los promotores, una de "las mayores apuestas de esta actuación es la integración de discapacitados", a los que se destinarán una parte de los empleos que se generen. Además de las pistas para la práctica del padel, que en principio son 14, pudiendo llegar a 18, se prevé la ejecución de un edificio para usos múltiples (recreativo, comercio, restauración ...). El plan general de urbanismo posibilita que en las instalaciones para utilidades deportivas que ocupen más de 5.000 metros cuadrados, como es el caso del proyecto del R-66, haya usos recreativos y de hostelería, además de otros terciarios como los comerciales.
El límite que pone el plan de urbanismo a estos usos ajenos al deportivo son que no superen el 25% de la superficie que se edifique y que se integren tanto funcional como jurídicamente en la finalidad principal, que es la deportiva. El plan general de urbanismo también regula que cuando las instalaciones puedan ocasionar molestias a los propietarios de los edificios colindantes se tendrá que prever el acondicionamiento acústico necesario.
Fuente: Diario Extremadura
Enlace patrocinado por
info@ingeypro.com
ingeypro. Servicios: Planes de Gestión de Residuos, Gestión de Obras, Planes de Seguridad y Salud, Eficiencia Energética, presupuestos, estudios de obras, Oficina técnica
ingeypro en Cáceres, Madrid y Sevilla
No hay comentarios:
Publicar un comentario