miércoles, 16 de mayo de 2012

El juzgado investiga la presunta falsedad en el informe de ruidos de La Madrila


El juzgado de Cáceres que instruye el caso de los bares cerrados en la zona de copas de La Madrila abre diligencias por la presunta falsedad en el informe de la Guardia Civil con las mediciones de ruido que sirvió a Cacereños Contra el Ruido para lograr el cierre cautelar de ocho establecimientos. Este documento, que se adjuntó en la querella de la asociación contra los hosteleros, fue determinante para que la Audiencia Provincial decretara hace dos meses la clausura temporal de los pubs.
Sin embargo, tras la declaración ayer del instructor de ese informe en sede judicial, como habían solicitado los hosteleros, la titular del Juzgado de Primera Instancia e Instrucción Número 6 de Cáceres acordó dar traslado a la Fiscalía por si los 18 vecinos querellantes, el presidente de Cacereños Contra el Ruido, su abogado y el procurador pudieran haber incurrido en un delito de falsedad en documento público y otro de aportación de documento falso en juicio, tal y como mantienen los abogados de las empresas clausuradas.
VERSIONES OPUESTAS Aunque las versiones que ofrecieron ayer vecinos y hosteleros fueron diametralmente opuestas, Antonio Durán, presidente de Cacereños Contra el Ruido, confirmó que él y su abogado, Eugenio Cuadrado, realizaron anotaciones en una copia que entregaron al juez con los nombres de los locales en los croquis que aparecen en el documento original del Servicio de Protección de la Naturaleza (Seprona) de la Guardia Civil. "No podíamos querellarnos contra unos puntos negros y el número que el instructor del informe asignaba a cada local. Teníamos que ponerles nombre", respondió Durán acerca de las acusaciones de presunta falsedad en el documento.
Este informe fue ordenado por la Fiscalía de Medio Ambiente al Seprona y, aunque sirvió a Cacereños Contra el Ruido para que la Audiencia diera el visto bueno a la medida cautelar del cierre de los ocho bares, fue rechazado inicialmente por la fiscal al considerar que las mediciones no estaban bien hechas. Cacereños Contra el Ruido dejó claro que no había sido manipulado y que la denuncia por presunta falsedad responde ahora a una estrategia de los hosteleros.
La tesis que defendieron ayer los abogados de las empresas tuvo como principal argumento la declaración del instructor del informe de la Guardia Civil ante el Seprona. En contra de lo que expresó posteriormente Cacereños Contra el Ruido y siempre según la versión de los letrados de los hosteleros consultados, el guardia civil puso de manifiesto ante la jueza que el informe había sido falsificado, que no se podía incriminar a ninguna persona concreta, ni siquiera indiciariamente, por un delito de contaminación acústica ni adoptar medidas cautelares de cierre.
CON NOMBRE Según explicaron los abogados, presentes en el juzgado durante la práctica de la prueba pericial al instructor del informe, éste llegó a asegurar que se había utilizado indebidamente, subrayando que, en ningún caso, había señalado el nombre de los locales de los que se supone que procedían los ruidos. Los letrados insistieron en la idea de que el informe del Seprona solo midió el ruido ambiental y no el de los locales. En el auto de la Audiencia Provincial por el que se decretó el cierre aparecen recogidos esos nombres y el de los titulares de las cinco viviendas de distintas calles de La Madrila en las que se realizaron las mediciones de ruido.
Tras el giro de 180 grados que dio ayer el caso, con los denunciantes bajo sospecha, Fernando Rodríguez, que defiende a Latinos y Down, solicitó a la jueza que levante las medidas cautelares y decrete el sobreseímiento del caso, extremo sobre el que debe pronunciarse ahora la Fiscalía. Según este abogado, la respuesta podría producirse entre hoy y mañana, con la posibilidad abierta de que los bares pudieran volver a funcionar este mismo fin de semana.
En cualquier caso, el presidente de Cacereños Contra el Ruido dejó claro que en la copia del informe que le hizo llegar la Fiscalía de Medio Ambiente "no ha sido alterado" y precisó que el instructor del Seprona había reconocido "que las mediciones no se realizaron de forma individualizada" local por local, extremo al que han recurrido los hosteleros para solicitar que se hagan nuevas pruebas.
Sin embargo, Durán insistió en la legalidad de la copia del informe ya que, afirmó, "simplemente le hemos dado nombre a los locales marcados por el Seprona". Para realizar estas anotaciones en los planos que aparecían en el documento se guiaron por "los puntos negros" que correspondían, a su entender, a determinados locales. "Estaría cometiendo una falsedad si en la

Fuente:El Periódico Extremadura
Enlace patrocinado por
info@ingeypro.com
ingeypro.  Servicios: Planes de Gestión de Residuos, Gestión de Obras, Planes de Seguridad y Salud, Eficiencia Energética, presupuestos, estudios de obras, Oficina técnica
Ingeypro en Cáceres, Madrid y Sevilla

No hay comentarios:

Publicar un comentario